El Primer Ministro tendrá autonomía para gestionar los aspectos diplomáticos y económicos de Cordeau, aunque todas sus decisiones deberán contar indudablemente con el apoyo y reconocimiento de Su Excelencia el Príncipe.
Mientras, don Benito I se ha encargado personalmente por el bien de la micronación de crear una empresa privada de producción petrolera, Benileo, con 10.000 empleados trabajando 12 horas diarias de lunes a domingo que producen 24.000 barriles de petróleo diarios.
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